El Departamento de Estado despedirá a más de 1.300 funcionarios este viernes, según un memorando interno
El Departamento de Estado despedirá a más de 1.300 personas este viernes como parte de una drástica revisión del trabajo de la agencia, según una notificación interna vista por CNN.
Los despidos afectarán a 1.107 funcionarios civiles y 246 agentes del servicio exterior. La noticia llega en medio de una drástica reorganización del Departamento de Estado como parte de los intentos más amplios del Gobierno de Trump de reducir el gobierno federal.
Cientos de oficinas fueron eliminadas o están siendo alteradas como resultado de los cambios.
Los empleados recibirán avisos de despido por correo electrónico, según el aviso. Los despidos se producen mientras el secretario de Estado, Marco Rubio, se encuentra fuera de la ciudad de Washington, en un vuelo de regreso desde un viaje al extranjero a Malasia.
“Casi 3.000 miembros de la fuerza de trabajo se irán como parte de la reorganización”, dice el aviso. Esta cifra incluye tanto a los despedidos como a los que se marchan voluntariamente.
“En relación con la reorganización del Departamento anunciada por primera vez por el secretario de Estado el 22 de abril de 2025, el Departamento está racionalizando las operaciones nacionales para centrarse en las prioridades diplomáticas”, dice el comunicado.
“Las reducciones de plantilla se han adaptado cuidadosamente para afectar a las funciones no esenciales, a las oficinas duplicadas o redundantes y a las oficinas en las que la centralización o consolidación de funciones y responsabilidades puede suponer una considerable eficiencia”, indica.
Los funcionarios del servicio exterior que reciban notificaciones de reducción de personal (RIF) el viernes estarán en situación de excedencia administrativa durante 120 días antes de perder formalmente su empleo, según la notificación. La mayoría de los funcionarios estarán de baja durante 60 días antes de que se haga efectivo su despido, según la notificación.
La RIF, que ha estado sobrevolando la agencia durante semanas, ha dejado a la plantilla en un limbo y desmoralizada a la espera del anuncio final sobre el destino de carreras a las que muchos han dedicado años o incluso décadas de sus vidas.
Quienes se oponen a los recortes afirman que tendrán un impacto negativo en un momento en que el papel de los diplomáticos y expertos en asuntos exteriores es particularmente importante, ya que el Gobierno de Trump intenta negociar el fin de las guerras en Ucrania y Medio Oriente.
También ha habido fuertes críticas a la reorganización general, que incluye cambios radicales para centrarse en las prioridades del Gobierno de Trump, como la reducción de la inmigración a Estados Unidos y la promoción de su visión del mundo, con menos énfasis en la protección y promoción de los derechos humanos en todo el mundo.
Funcionarios de la administración Trump han defendido la reorganización, argumentando que era necesaria para que la agencia, que está “sobredimensionada”, fuera más eficaz y se alineara con las prioridades del presidente.
Rubio afirmó el jueves que la reorganización se estaba implementando “probablemente de la manera más deliberada que se haya hecho jamás”.
Un alto funcionario del Departamento de Estado, al ser consultado cuánto dinero se estimaba que ahorrarían a los contribuyentes los despidos, no pudo dar una respuesta específica, pero afirmó que la solicitud de presupuesto para el próximo año fiscal “refleja ahorros sustanciales”.
El funcionario afirmó que el plan de la RIF “consideraba las funciones que se desempeñaban, no a las personas”.
“Si se estaba desempeñando una función en particular que ya no estaba alineada con lo que el departamento haría en el futuro, esa función se eliminaba”, declaró el funcionario el jueves. “Era un asunto de personal independiente”.
Los despidos están afectando tanto a los miembros del servicio civil como al servicio exterior en la ciudad de Washington. Los funcionarios del servicio exterior suelen estar altamente capacitados, hablan varios idiomas y prestan servicios en todo el mundo en nombre de Estados Unidos. Si trabajaban en una oficina ahora eliminada el 29 de mayo, día en que Rubio aprobó el plan de reorganización, podrían ser despedidos.
Por el momento, no hay planes de recortes en las oficinas en el extranjero, afirmó el alto funcionario del Departamento de Estado.
Thomas Yazdgerdi, presidente de la Asociación Estadounidense del Servicio Exterior, el sindicato que representa a los funcionarios del servicio exterior, afirmó que los próximos despidos llegan “en un momento particularmente malo”.
“Están sucediendo cosas terribles en el mundo que requieren un cuerpo diplomático de probada eficacia capaz de abordarlas”, declaró a CNN el miércoles. “La capacidad de mantener una presencia en zonas del mundo de suma importancia, abordando asuntos como Ucrania, Gaza e Irán que requieren una gran atención diplomática en este momento”.
Yazdgerdi, diplomático de carrera, afirmó que no cree que los planes de la RIF consideren “la naturaleza única del servicio exterior”.
“Somos como las fuerzas armadas. Tenemos rangos personales y un sistema de ascensos o bajas. No estamos atados a ningún puesto en particular”, explicó. “Si se va a RIF una oficina, no estamos atados a ella”.
Señaló que incluso antes del Gobierno de Trump, el cuerpo diplomático estaba “al límite de sus recursos” y “no podía dotar de personal suficiente a las embajadas en el extranjero” en un momento en que China “nuestro mayor rival, no tenía ningún problema en hacerlo”.
“Están sucediendo cosas terribles en el mundo que requieren un cuerpo diplomático de probada eficacia capaz de abordarlas”, declaró a CNN el miércoles. “La capacidad de mantener una presencia en zonas del mundo de suma importancia, abordando asuntos como Ucrania, Gaza e Irán que requieren una gran atención diplomática en este momento”.
Yazdgerdi, diplomático de carrera, afirmó que no cree que los planes de la RIF consideren “la naturaleza única del servicio exterior”.
“Somos como las fuerzas armadas. Tenemos rangos personales y un sistema de ascensos o bajas. No estamos atados a ningún puesto en particular”, explicó. “Si se va a RIF una oficina, no estamos atados a ella”.
Señaló que incluso antes de la administración Trump, el cuerpo diplomático estaba “al límite de sus recursos” y “no podía dotar de personal suficiente a nuestras embajadas en el extranjero en un momento en que China, nuestro mayor rival, no tenía ningún problema en hacerlo”.
Yazdgerdi cree que los despidos tendrán un impacto no solo en la moral, sino también en el reclutamiento y la retención de talentos.
Mientras tanto, el alto funcionario del Departamento de Estado declaró el jueves que querían gestionar los despidos de una manera que preserve, en la mayor medida posible, la dignidad de los empleados federales, los funcionarios del servicio exterior y los funcionarios públicos afectados por esto.
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