Argentina en los Mundiales de fútbol: todos los datos del campeón
Juan Pablo Elverdin
(CNN Español) — Argentina llegó a Qatar como uno de los grandes favoritos para quedarse con el título del Mundial, pero tuvo un inesperado traspié en su debut contra Arabia Saudita. Pero recompuso el camino, llegó a la final y se impuso de manera agónica en la final contra Francia para conseguir la ansiada tercera, con un Messi histórico, un equipo —la Scaloneta— que marcó una época y una alegría sin precedentes —con una buena dosis de sufrimiento— para una selección y un país que la necesitaban.
La selección dirigida por Lionel Scaloni ganó la final contra Francia, con un juego ofensivo y muy efectivo, pero sobre todo con mucha pasión, con un ímpetu no igualado por ninguna selección. Fue la consagración de Lionel Messi, ahora ya considerado ampliamente el mejor jugador de la historia y con el título que le faltaba para enmarcar una carrera sin parangón, como el líder en todas las marcas para cualquier argentino y el poseedor de numerosos récords mundiales.
Argentina es campeón del mundo. ¡La Scaloneta y Messi ganaron el Mundial en una final épica!
Argentina, tres veces campeón y tres subcampeón
Histórico animador de los mundiales desde el inicio mismo de la competencia (fue subcampeón en el primer Mundial disputado en Uruguay en 1930), Argentina conquistó tres veces la Copa del Mundo: como anfitrión en 1978, de la mano de Diego Maradona en México 1986 y ahora Messi llevó a la Albiceleste a la tercera en Qatar 2022.
Además, fue subcampeón en tres oportunidades: 1930; en Italia 1990 y en Brasil 2014, ambas finales perdidas ante Alemania por sendos 0-1.
La selección sudamericana disputó 18 de los 22 mundiales que se han jugado hasta el momento: solo estuvo ausente en Francia 1938, Brasil 1950, Suiza 1954 y México 1970.
A continuación te contamos cómo le ha ido a Argentina en cada uno de los mundiales en los que participó.
Estos han sido los 8 partidos históricos de Argentina en los Mundiales de fútbol
Uruguay 1930
La primera cita mundialista se realizó en Uruguay en 1930, en una época en la que el fútbol comenzaba a crecer en todo el mundo. Y, claro, la organización de aquel torneo estuvo lejos de lo que son los espectáculos a los que estamos acostumbrados en el actual mundo globalizado.
Con tan solo 13 participantes, Argentina fue uno de los grandes animadores y llegó a la final, en la que cayó ante el local Uruguay por 2-4, en un encuentro que lo tuvo arriba del marcador al cabo del primer tiempo.
En total, el conjunto argentino disputó 5 partidos, con 4 triunfos y una derrota. Convirtió 18 goles y recibió 9. Tuvo al goleador del torneo, Guillermo Stábile, que anotó 8 tantos.
30 de julio de 1930: Uruguay marca otro gol durante la final de la Copa Mundial de la FIFA contra Argentina jugada en Montevideo, Uruguay. Uruguay ganó el trofeo y el partido por 4-2. (Foto: Allsport/HultonN)
Italia 1934
El primer mundial disputado en Europa volvió a tener entre los participantes a Argentina, aunque con un resultado totalmente diferente al de la cita inaugural.
Esta vez, fueron 16 los países que disputaron el segundo Mundial de la historia, que estuvo marcado por el difícil momento político que vivía el mundo, con el ascenso del nazismo en Alemania y el fascismo en Italia, en lo que sería la antesala de la Segunda Guerra Mundial.
El torneo se disputó directamente con rondas eliminatorias, y Argentina, que presentó un equipo integrado por futbolistas amateurs, cayó ante Suecia por 2-3 en su única presentación.
Suecia 1958
Suecia 1958 significó el regreso de Argentina a los mundiales, después de 24 años de ausencia (no participó en Francia 1938, Brasil 1950 y Suiza 1954; en la década del 40 no hubo competencia debido a la Segunda Guerra Mundial).
Argentina viajó a Europa con un equipo plagado de estrellas que era dominador en el continente. Pero los resultados no fueron los esperados, sufrió una goleada inesperada ante Checoslovaquia (1-6) y terminó último en su grupo y eliminado en primera fase. Aquel torneo es recordado para los futboleros argentinos como “El desastre de Suecia”.
Argentina disputó tres encuentros con un solo triunfo (3 a 1 a Irlanda del Norte) y dos derrotas (1-3 vs Alemania Federal y la mencionada goleada ante Checoslovaquia).
Brasil fue el gran campeón de aquel torneo tras derrotar en la final por 5 a 2 al anfitrión.
Chile 1962
Sudamérica volvía a recibir la Copa del Mundo después de dos ediciones consecutivas disputadas en Europa, y Chile era el anfitrión por primera vez. Argentina llegaba con pocas expectativas, golpeada por lo que había sido el fracaso cuatro años antes. Y si bien el rendimiento fue superior a lo ocurrido en Suecia, el conjunto albiceleste no pudo superar la fase de grupos.
Un empate sin goles frente a Hungría en el debut, una derrota ante Inglaterra 1-3 y un triunfo por 1 a 0 frente a Bulgaria en el cierre condenaron a Argentina a la eliminación por diferencia de goles, ya que logró 3 puntos, la misma cantidad que Inglaterra, que finalmente avanzó de fase junto a Hungría.
Brasil volvió a ser el campeón y el torneo tuvo la particularidad de tener 6 goleadores.
Inglaterra 1966
Los “inventores del fútbol” recibían el Mundial en 1966, con la expectativa de alzarse con el trofeo por primera vez en su historia. Y Argentina llegaba en medio de un proceso de organización interna tumultuosa.
Con grandes figuras a nivel local y sudamericano, el conjunto albiceleste logró avanzar de fase por primera vez desde 1930, en un grupo en el que terminó segundo. Dos triunfos ante España y Suiza y un empate en cero ante Alemania Federal mostraban al conjunto sudamericano con la concreta posibilidad de volver a ser protagonista en el Mundial.
Claro que en cuartos de final debió enfrentarse ante los dueños de casa, que se quedaron con el triunfo por 1 a 0 con un tanto anotado a apenas 12 minutos del final del partido. Aquel encuentro quedó en el recuerdo por la expulsión el capitán del equipo argentino, el mediocampista Antonio Rattin.
Inglaterra fue finalmente el campeón del torneo tras derrotar en la final por 4 a 2 a Alemania Federal.
Geoff Hurst marca durante los cuartos de final de la Copa del Mundo de Inglaterra contra Argentina en Wembley. 23 de julio de 1966. Inglaterra ganó el partido por 1-0. (Foto de Central Press/Hulton Archive/Getty Images)
Alemania 1974
Argentina no logró clasificar para el Mundial de México 1970, y recién volvió a la competencia en Alemania, en 1974. El torneo terminaría en un nuevo fracaso rotundo para el conjunto sudamericano.
Argentina sorteó la fase de grupos por diferencia de goles, que esta vez lo favoreció. El conjunto albiceleste perdió 2-3 ante la por entonces poderosa Polonia, igualó 1 a 1 con Italia y goleó por 4 a 1 a Haití. Ese triunfo abultado le permitió tener un gol más que los italianos y avanzar a la segunda fase.
Allí, Argentina se topó con el poderío de la “Naranja mecánica” de Países Bajos, que lo goleó 4 a 0 en el primer encuentro. Una nueva derrota 1-2 ante Brasil y un empate en 1 ante Alemania Democrática terminarían por sellar la suerte del conjunto albiceleste, que terminó último en su grupo de la segunda fase.
Finalmente, Alemania Federal se quedaría con el título tras vencer a Países Bajos en la final por 2 a 1.
Argentina 1978: por primera vez, campeón mundial
Y llegó el gran festejo. Argentina, que se encontraba en un momento difícil de su vida institucional ya que era gobernada por una dictadura militar que había tomado el poder dos años antes, fue el anfitrión del Mundial de 1978. Y no dejó pasar la oportunidad.
El seleccionado se preparó especialmente para ser protagonista del torneo, con una organización que había roto la improvisación de los años anteriores. El entrenador César Luis Menotti asumió su cargo en 1974, con una propuesta de juego ofensiva y vistosa que había mostrado en el título logrado en 1973 dirigiendo a Huracán de su país.
El conjunto argentino comenzó su camino mundialista con un triunfo por 2 a 1 ante Hungría en Buenos Aires, en el marco del Grupo 1, con tantos de Luque y Bertoni. Otro triunfo por idéntico resultado ante Francia, esta vez con tantos de Passarella y Luque, pusieron al anfitrión en una posición inmejorable de cara a la segunda ronda.
Sin embargo, la derrota 0-1 ante Italia, en el cierre del grupo, dejó al conjunto dirigido por Menotti en el segundo lugar y lo obligó a mudar su localía a la ciudad de Rosario, en la provincia de Santa Fe.
La segunda ronda comenzó con una victoria por 2 a 0 ante Polonia con dos tantos del delantero Mario Kempes, quien sería determinante en el torneo a partir de esa instancia. La segunda fecha lo enfrentó nada menos que a Brasil, que había vencido 3 a 0 a Perú en el inicio de la segunda ronda. El 0 a 0 dejó abierta la definición para la última jornada.
Allí, como Brasil ya había derrotado a Polonia por 3 a 1, Argentina enfrentó a Perú obligada a conseguir una goleada para llegar a la final. Y vaya que lo consiguió: fue victoria por 6 a 0 con dos goles de Kempes, dos de Luque, uno de Tarantini y otro de Houseman. Argentina, después de 48 años, volvía a llegar a una final del Mundial.
Mario Kempes (izq.), que acaba de marcar su segundo gol, celebra delante del delantero Daniel Bertoni y los defensores holandeses Wim Suurbier (en el suelo) y Ruud Krol (frente a la cámara) el 25 de junio de 1978 en Buenos Aires durante la prórroga de la final de la Copa del Mundo de fútbol entre Argentina y Holanda. (Foto: STAFF/AFP vía Getty Images)
Países Bajos, quien la había eliminado con goleada cuatro años antes, era el rival en la finalísima, que se disputó en el estadio Monumental de Buenos Aires. Pese a no contar con Johan Cruyff, su máxima figura, el conjunto europeo era, por nivel y continuidad, el favorito a quedarse con el Mundial, que se le había negado en la edición anterior.
Argentina comenzó ganando con un gol de Kempes en el minuto 38, pero el delantero Nanninga logró la igualdad para Países Bajos a falta de 8 minutos para finalizar el encuentro, que debió ir a la prórroga.
Allí, Argentina se hizo fuerte y con otro tanto de Kempes en el minuto 105 y uno de Bertoni, en el 115, logró el triunfo que le dio el primer título mundial de su historia. Por si fuera poco, tuvo al goleador del torneo, Mario Kempes, quien anotó 6 tantos y también fue elegido como el mejor jugador.
España 1982
Argentina llegaría al Mundial de España 1982 con varias particularidades: por primera vez era el defensor del título, con lo que aparecía entre los favoritos a quedarse con el torneo. Además, el campeonato coincidía con el final de la guerra de Malvinas. Por si fuera poco, las canchas españolas vieron el debut mundialista de un mediocampista llamado Diego Armando Maradona.
El torneo no empezó nada bien para Argentina, que en su debut cayó 0-1 ante Bélgica. Sin embargo, los triunfos ante Hungría (4 a 1, con dos goles de Maradona, los primeros que marcaría en los mundiales) y ante El Salvador (2 a 0) le permitieron al conjunto sudamericano ser uno de los dos clasificados en el Grupo C detrás de Bélgica.
Ese segundo puesto determinó que Argentina jugara en segunda ronda nada menos que ante Italia (el campeón) y Brasil, y poco pudo hacer. En Barcelona, cayó 1-2 ante los europeos, mientras que tres días después, fue derrota 1-3 en el clásico sudamericano, en el que fue expulsado Maradona.
De esa forma, Argentina quedaba eliminado y concluía el exitoso ciclo de César Luis Menotti, que le dio el primer título mundial.
México 86, otra vez la gloria para Argentina
El Mundial de México disputado en 1986 está grabado a fuego en los corazones de los aficionados argentinos. Es que las tierras aztecas vieron al mejor Diego Armando Maradona, que convirtió el mejor gol en la historia de los mundiales y llevó a Argentina a su segundo (y último, hasta el momento) título mundial.
México se convirtió en el primer país en organizar dos veces el Mundial. La sede original del torneo era Colombia, pero en 1983, la FIFA la reemplazó ante la imposibilidad del país de cumplir con los requerimientos establecidos. El campeonato, además, cambió su forma de realización con la disputa de fases eliminatorias desde los octavos de final.
Argentina ganó el Grupo A luego de sus triunfos ante Corea del Sur (3 a 1) y Bulgaria (2 a 0) y el empate ante Italia (1 a 1). En octavos de final debió enfrentar al duro Uruguay en el clásico del Río de la Plata. Fue un difícil triunfo por 1 a 0.
El 22 de junio de 1986 el estadio Azteca de la ciudad de México fue testigo de uno de los partidos más recordados en la historia de los mundiales. Argentina e Inglaterra se enfrentaban por un lugar en semifinales, con la reciente Guerra de Malvinas a flor de piel.
Tras un primer tiempo parejo y sin goles, el segundo período quedó para la posteridad. Primero, Maradona anotó con la mano el primer gol argentino, en el tanto conocido como “La mano de Dios”. Pero minutos después, para dejar en claro de que era el mejor jugador del planeta, amplió el marcador con lo que es considerado como el mejor gol en la historia de los mundiales. Finalmente, Argentina se impuso por 2 a 1 y accedió a semifinales.
Tras el triunfo por 2 a 0 con dos goles de Maradona ante Bélgica, Argentina se clasificó para jugar su tercera final en un Mundial. Y fue triunfo por 3 a 2 ante Alemania Federal, con lo que el conjunto que dirigía Carlos Salvador Bilardo se alzaba con el preciado trofeo.
México 1986 fue, sin dudas, el Mundial de Diego Armando Maradona, que se quedó con el Balón de Oro al mejor jugador del torneo.
Diego Maradona celebra con la Copa del Mundo en México 1986. (Foto: Mike King/ALLSPORT)
Italia 1990
Argentina llegó a Italia 1990 como el último campeón, pero bajo condiciones diferentes a las de cuatro años antes. Con algunas bajas respecto al último Mundial y con un Diego Maradona en baja condición física, el equipo de Bilardo inició su camino con una inesperada derrota ante Camerún, en lo que fue una de las sorpresas históricas.
Argentina se recuperó ante Unión Soviética con una victoria por 2 a 0, en un encuentro fatídico para el arquero Nery Pumpido, quien sufrió una fractura y se despidió del torneo. En el último juego, el conjunto sudamericano comenzó ganando ante Rumania, que minutos después consiguió el empate y “condenó” a Argentina a clasificar a octavos de final pero como uno de los mejores terceros de la fase de grupo.
Esa posición lo emparejó nada menos que ante Brasil, que había ganado sus tres partidos en la fase de grupos. Tras un primer tiempo con un total dominio de la “canarinha”, Maradona frotó la lámpara a falta de 10 minutos para culminar el encuentro, dejó solo a Claudio Canniggia frente al arquero, el rubio delantero no falló y le dio el triunfo y la clasificación a cuartos de final. Fue otra jornada histórica para la memoria del aficionado argentino.
En cuartos de final, los penales le dieron la clasificación a Argentina ante Yugoslavia, tras un empate sin goles durante el tiempo regular.
En semifinales, el equipo dirigido por Carlos Salvador Bilardo enfrentó al local, que llegaba a esa instancia ganando todos sus encuentros y sin recibir goles en contra. Pero la “mística” del equipo argentino se hizo presente en el estadio San Paolo de Nápoles, la “segunda casa” de Maradona. Tras igualar 1 a 1 en el tiempo reglamentario, el arquero Sergio Goycoechea se hizo gigante en los penales y le dio la clasificación a la final, otra vez ante Alemania, como cuatro años antes.
La revancha con los europeos estaría plagada de dificultades para el conjunto argentino, que llegó al partido decisivo con varios lesionados y suspendidos, entre los que estaba Claudio Paul Canniggia, la figura del Argentina en el Mundial. Argentina aguantó todo lo que pudo, pero a falta de 5 minutos para culminar los 90 reglamentarios, el árbitro mexicano Edgardo Codesal cobró un polémico penal que el defensor Andreas Brehme cambió por gol. Fue el final del sueño argentino de conseguir su tercera Copa del Mundo, y las lágrimas de Maradona tras la definición recorrieron el mundo.
Diego Maradona llora durante la ceremonia de entrega de la Copa del Mundo de 1990 después de que Argentina fuera derrotada por Alemania Occidental 0-1 en la final el 8 de julio de 1990 en Roma. (Foto de OMAR TORRES/AFP vía Getty Images)
Estados Unidos 1994
Argentina llegó al Mundial de Estados Unidos tras ganar el repechaje ante Australia, en una serie que significó el regreso de Maradona a la selección, de la que se había alejado tras el Mundial de Italia y la salida de Bilardo de la dirección técnica. Pero el bajo nivel del equipo, que sufrió la histórica goleada en contra (0-5) ante Colombia en Buenos Aires, en la última jornada de las eliminatorias, obligó al nuevo entrenador, Alfio Basile, a convocarlo para el repechaje.
Maradona sería el gran protagonista del torneo, pero no por su nivel futbolístico. Tras una goleada en el debut en el Grupo D por 4 a 0 ante Grecia, con una gran actuación colectiva y un antológico gol de Maradona, Argentina derrotó a Nigeria por 2 a 1, ratificando su condición de favorito al título. Pero aquel encuentro significó un duro golpe para los sudamericanos, ya que Maradona dio positivo en el control antidopaje, por lo que fue expulsado de la competencia.
Argentina, que había mostrado un gran nivel en los dos primeros encuentros, sintió el golpe: perdió 0-2 con Bulgaria en el cierre del grupo y sufrió una temprana eliminación en octavos de final a manos de Rumania, una de las grandes sorpresas del torneo, que lo venció por 3 a 2. La historia de Diego Maradona con la camiseta de la selección argentina llegaba abruptamente al final, de la manera menos deseada.
Francia 1998
El último Mundial del siglo XX, disputado en Francia, sería el primero para Argentina de la era post-Maradona, quien se había retirado de la práctica profesional del fútbol a mediados de 1997.
Dirigido por Daniel Passarella, campeón como futbolista en 1978 y 1986, Argentina buscaba recuperar su brillo y volver a instalarse entre los favoritos. Tras ganar sus tres partidos del Grupo H (1 a 0 a Japón; 5 a 0 a Jamaica y 1 a 0 a Croacia), Argentina chocó nada menos que ante Inglaterra en octavos de final. Y luego de una emotiva igualdad 2 a 2 durante el tiempo reglamentario, el equipo sudamericano avanzó a cuartos de final por penales.
Allí chocaría ante Países Bajos, un duro escollo que significó el final de la travesía argentina en Francia. El conjunto europeo se impuso por 2 a 1 en un encuentro muy parejo, y avanzó a las semifinales.
Corea-Japón 2002: un golpe doloroso e histórico para Argentina
De la mano de Marcelo Bielsa, Argentina llegó al Mundial organizado de manera conjunta por Corea del Sur y Japón como uno de los grandes favoritos, después de terminar primero en las eliminatorias sudamericanas, con un equipo que mostraba un alto nivel futbolístico.
Sin embargo, la primera Copa del Mundo del siglo XXI y la primera disputada en Asia significaría un duro e histórico golpe para el conjunto sudamericano, que no podría sortear la fase de grupos.
El delantero argentino Gabriel Batistuta es consolado por un funcionario de la FIFA mientras abandona el terreno de juego tras el partido Suecia/Argentina de la primera ronda del Grupo F de la Copa Mundial de la FIFA Corea-Japón 2002, el 12 de junio de 2002 en el estadio Myagi. (Foto: Odd Andersen/AFP vía Getty Images)
Argentina comenzó ganando en el debut del Grupo F ante Nigeria por 1 a 0, pero una derrota ante Inglaterra en la segunda jornada por 0-1 lo obligaba a ganar en el último juego ante Suecia para avanzar a octavos de final.
A pesar de dominar ampliamente el juego ante los europeos, el conjunto albiceleste apenas consiguió una igualdad en un tanto, con lo que quedó eliminado por primera vez en la fase de grupos desde 1962. Fue el final del ciclo de jugadores históricos como el goleador Gabriel Batistuta y Claudio Paul Canniggia, que estuvo en el plantel pero no llegó a disputar minutos.
Por si fuera poco, Brasil fue el gran campeón del torneo tras vencer en la final a Alemania.
Alemania 2006
El Mundial volvió a disputarse en Alemania en 2006, y Argentina llegó con aires renovados, de la mano del entrenador José Néstor Pekerman, que había dirigido con rotundo éxito los seleccionados juveniles con los que había logrado varios títulos.
Con Juan Román Riquelme como gran figura, y con un muy joven Lionel Messi, que disputaba su primera Copa del Mundo, Argentina hizo una gran fase de grupos en la que terminó primera con 7 unidades, luego de 2 triunfos (ante Costa de Marfil, 2 a 1, y frente a Serbia por 6 a 0) y una igualdad sin goles frente a Países Bajos.
En octavos de final, Argentina tuvo que recurrir a la prórroga para derrotar a la dura selección de México, que había comenzado ganando el torneo. Finalmente, fue triunfo por 2 a 1 para los sudamericanos.
El sueño albiceleste llegaría a su fin en cuartos de final frente al local Alemania, que se impuso por penales tras un empate en un tanto durante el tiempo reglamentario.
Sudáfrica 2010
Cuatro años después, el Mundial llegaba por primera vez al continente africano, con Sudáfrica como anfitrión. Hasta allí llegó Argentina en busca del oro perdido, nada menos que con Diego Maradona como director técnico. El astro asumió en 2009 y consiguió una agónica clasificación en las eliminatorias sudamericanas.
Con un Messi brillante en el Barcelona, el sueño argentino de gritar campeón de la mano de sus dos mejores futbolistas de la historia estaba a flor de piel. Pero la “maldición” de los cuartos de final otra vez se haría presente.
Diego Maradona y Lionel Messi, durante el partido de octavos de final de la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010 entre Argentina y México en el estadio Soccer City el 27 de junio de 2010 en Johannesburgo, Sudáfrica. (Foto de Richard Heathcote/Getty Images)
Argentina clasificó con puntaje ideal en el Grupo B, tas derrotar a Nigeria (1 a 0), Corea del Sur (4 a 1) y a Grecia (1 a 0). Como cuatro años antes, en octavos de final chocaría con México, a quien, esta vez, lo derrotaría durante los 90 minutos reglamentarios por 3 a 1. Y, como en 2006, Alemania lo esperaba en cuartos de final.
A pesar de llegar a esa instancia con cuatro triunfos en igual cantidad de partidos, el juego de Argentina no terminaba de conformar. Y los europeos se lo hicieron sentir: tras ponerse rápidamente en ventaja, Alemania redondeó un 4 a 0 para eliminar al equipo de Maradona y Messi, quien, extrañamente, se iría de Sudáfrica sin marcar goles.
Las tierras africanas vieron gritar campeón a España por primera vez y a Diego Maradona despedirse para siempre de su selección.
Brasil 2014: Argentina, de vuelta a la final
El Mundial volvió a Sudamérica en 2014 para disputarse por segunda vez en su historia en Brasil, quien, por razones obvias, era el gran favorito para quedarse con el título.
Argentina llegó con un equipo bien construido por Alejandro Sabella, quien había sido ayudante técnico de Daniel Passarella en Francia 1998. Y tenía a un Lionel Messi maduro, que buscaba mostrar su verdadero nivel en su tercera Copa del Mundo. Y no defraudaría.
Argentina superó la fase de grupos con tres triunfos (2 a 1 ante Bosnia; 1 a 0 frente a Irán y 3 a 2 ante Nigeria), pero el nivel no conformaba. Messi fue la gran figura de esa primera fase al anotar 4 goles.
Pero a partir de octavos de final, el conjunto albiceleste cambió su estilo de juego, se hizo más fuerte en defensa y, con un juego menos vistoso pero más efectivo, avanzó hacia la final. Sucesivamente eliminó a Suiza (1 a 0, gol de Ángel Di María), a Bélgica (1 a 0, gol de Gonzalo Higuaín) y a Países Bajos por penales, tras igualar 0 a 0.
El seleccionador Alejandro Sabella de Argentina mira a su equipo después de ser derrotado por Alemania 1-0 durante el partido de la final de la Copa Mundial de la FIFA Brasil 2014 entre Alemania y Argentina en Maracaná el 13 de julio de 2014 en Río de Janeiro, Brasil. (Foto de Martin Rose/Getty Images)
En la final, una vez más, se enfrentaría a su “bestia negra” Alemania, que venía de eliminar nada menos que a Brasil con una goleada histórica por 7 a 1 en el estadio Maracaná de Río de Janeiro.
Esa final fue, tal vez, el mejor partido de Argentina en todo el torneo: logró anular la potencia ofensiva de los europeos y creó varias situaciones de gol que no pudo concretar. Y en la prórroga, en el minuto 112, Mario Götze le dio el cuarto título a Alemania, dejando a Argentina con las manos vacías.
Ni siquiera el Balón de Oro de la FIFA como mejor jugador del torneo pudieron aplacar las lágrimas de Lionel Messi que, plagado de títulos, veía nuevamente frustarse su sueño mundialista.
Rusia 2018
Sin Alejandro Sabella, y ya sin Julio Humberto Grondona, presidente de la AFA durante 35 años, quien falleció días después de la final en Brasil, Argentina llegó al Mundial de Rusia en medio de una crisis institucional, con tres entrenadores en cuatro años, y logrando la clasificación en la última fecha de las eliminatorias.
Con Jorge Sampaoli como entrenador, Argentina sufrió el torneo desde el debut mismo, cuando apenas igualó 1 a 1 ante la debutante Islandia, con penal errado de Lionel Messi incluido. En el segundo encuentro del Grupo D, el seleccionado sudamericano sufrió una dura derrota 0-3 ante Croacia, que lo dejó al borde de la eliminación. Sin embargo, un agónico triunfo por 2 a 1 ante Nigeria, con un tanto de Marcos Rojo a falta de solo 4 minutos para finalizar el encuentro le dieron el pasaje a la siguiente ronda.
En octavos de final debió cruzarse nada menos que contra Francia, que sería el campeón del torneo. En un partido cambiante, Argentina llegó a estar arriba en el marcador por 2 a 1 en el inicio del segundo tiempo, pero en una ráfaga de goles, los europeos se colocaron 4 a 2. Argentina descontó sobre el final y casi iguala en la última jugada del encuentro, pero finalmente quedó eliminado. Fue un duro golpe (uno más) para la generación liderada por Messi.
Qatar 2022: ¡la Scaloneta gana la tercera!
Con Lionel Scaloni al mando, consiguiendo antes del Mundial una racha histórica para Argentina de 36 victorias, la Scaloneta llegó al Mundial como favorito pero tuvo una derrota inesperada en el primer partido contra Arabia Saudita. El equipo se recompuso y Lionel Messi, decidido a levantar el título, en su último Mundial jugó su mejor torneo. Derrotó a México y a Polonia en la fase de grupos, superó a Australia en octavos de final, en cuartos empató con Países Bajos y avanzó al ganar la tanda de penaltis y goleó a Croacia en la semifinal. En la final de infarto contra Francia, iba ganando 2-0 con goles de Lionel Messi (penal) y Ángel Di María, pero Kylian Mbappé empató el partido con dos goles seguidos (uno de penal) que le dieron la vuelta al partido en un solo minuto fatídico. En el segundo tiempo añadido, Messi metió un gol agónico. Y poco después, Mbappé volvió a anotar. Fue 3-3 en el tiempo global y a penaltis. En los penales, Argentina ganó 4-2. Montiel marcó el último cobro. Júbilo total. El Dibu Martínez fue el héroe de nuevo: atajó un penal.
Argentina es campeón del mundo. ¡La Scaloneta y Messi ganaron el Mundial en una final épica!
Messi fue el protagonista, el líder, el mejor jugador: siete goles y récords en anotaciones y asistencias para los argentinos en Mundiales y récord como futbolista de todo el mundo con más partidos jugados en Mundiales.
Un título histórico para una selección que había perdido la final en 2014.
(Crédito: Richard Heathcote/Getty Images)
Los números de Messi con la selección de Argentina: partidos, goles, títulos
Números totales de Argentina en los Mundiales
Estas son las cifras de Argentina en los Mundiales.
Argentina estuvo presente en 18 de los 22 mundiales disputados hasta el momento Fue campeón en 1978, 1986 y 2022 Perdió las finales de 1930, 1990 y 2014 Quedó eliminado en primera ronda en 1934, 1958, 1962 y 2002 Disputó un total de 88 partidos: 47 triunfos, 17 empates y 24 derrotas Marcó 152 goles y recibió 101 Máximo goleador: Lionel Messi: 13 goles en 5 Mundiales (2006-2022). Más presencias: Lionel Messi, 26 partidos en 5 Mundiales. Lionel Messi acumuló 26 partidos en Mundiales.
Nota del editor: este artículo fue publicado originalmente en octubre y actualizado el 18 de diciembre de 2022.
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